Con la particularidad de que el gobernador Hermes Binner y el intendente Miguel Lifschitz no emitieron sus tradicionales discursos, la presidenta se convirtió en la única oradora del acto oficial del 20 de junio en el Monumento a la Bandera. En un discurso más extenso que lo habitual Cristina pidió "cambiar actitudes con los que piensan diferente" que no significa "renunciar a nuestro proyecto sino reafirmarlo. Estamos seguros del rumbo del país". Y citó a Sarmiento: "Más allá de las diferencias políticas, debemos considerarlo como alguien que luchó por el progreso y la educación”.
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