Tras el shock (interno y externo) que generó la foto de Olivos, el Gobierno busca retomar su plan original a poco más de 15 días de las PASO. Ser oficialismo implica riesgos (por ser el actor a evaluar), pero también incluye ventajas ejecutivas por disponer de los resortes del Gobierno. Además del clásico bombeo económico preelectoral, la Casa Rosada apuesta a la normalización y el regreso de hitos simbólicos, como el fútbol. Ayer, se anunció que la selección jugará con público el jueves previo a las PASO. Una acción que alimenta el slogan oficial de "volver a vivir la vida que queremos". Así, el campeón de América jugará con un estadio con 30% de su capacidad. Otra medida en ese sentido podría ser el anuncio de la apertura de fronteras para turistas extranjeros. El elevado ritmo de vacunación, junto con una baja de casos, habilitan las menores restricciones para un Gobierno que, en 2020, fue muy criticado por las medidas en ese frente. Otro anuncio importante fue la llegada de las vacunas de Pfizer. Ayer, el Gobierno y el laboratorio confirmaron que arribarán 20 millones de dosis. El primer lote llegaría la primera semana de septiembre .
Fuente: El Economista
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