Bajo el lema "sin Justicia no hay República", Miles de personas se reunieron hoy en las puertas del Palacio de Tribunales para rechazar la corrupción y la impunidad. Los manifestantes primero gritaron "sí, se puede", el cántico que el presidente Mauricio Macri repitió durante toda la campaña hasta llegar a la Casa Rosada, y luego apuntaron directamente contra los jueces: "Poder Judicial, vergüenza nacional". Paolo Menghini, padre de Lucas, una de las 52 víctimas fatales de la Tragedia de Once, fue uno de los oradores. Desde el escenario exigió: "La corrupción enquistada en el poder, junto a la empresarial, se llevó puesta la vida de nuestros familiares. La corrupción, la impunidad y la injusticia matan. Este país, lamentablemente, aprende a base de muerte. No importa a quiénes votemos porque todos queremos un país justo. Espero que Julio De Vido esté muy pronto frente al tribunal". Por su parte, la filósofa Diana Cohen Agrest, madre de Ezequiel, asesinado en 2011 por Sebastián Pantano, consideró: "Gran parte de la clase dirigente hizo del Estado un negocio que costó miles de vidas. Los que tienen que juzgar son cómplices de los denunciados. Y la sospechosa complicidad legislativa coronó la impunidad". Los manifestantes también realizaron la "Marcha de las velas por la Justicia: para que la luz de la verdad ilumine el entendimiento de los jueces". Los organizadores del acto de hoy prometieron volver a marchar el jueves 7 de septiembre.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario