De cara a las elecciones: “Algunos nos quieren hacer mirar para atrás, nos quieren decir que lo que se estuvo haciendo era lo mejor. En esta línea, opinó que “hoy estamos en una situación absolutamente distinta. Han pasado más de 15 años de debate sobre los subsidios sí o los subsidios no. Nuestro movimiento tomó el camino de no a los subsidios porque creemos que va en contra de la cultura del trabajo, que es la única herramienta para salir de la pobreza. Fue un debate teórico en ese momento, y hoy la realidad nos dice que seguimos teniendo tantos o más pobres que en ese momento, y para peor, con un agravante que es la pobreza estructural, que antes no había”
. Nosotros queremos tomar el presente y resolver los problemas del presente mirando al futuro. Queremos encarar en serio la cuestión del diagnóstico y las soluciones y proponer el debate, para que sea la gente la que realmente empiece a resolver hacia dónde quiere ir”. Por último, evaluó: “Estoy convencido de que hoy no hay conflictos sociales como en los ‘90 o el 2001 porque la gente tiene una enorme esperanza en un proceso de cambio, un cambio que no es solamente para las clases medias y altas, sino también para los núcleos de pobreza, que están cansados de que los ninguneen, de que los traten como animales, que solamente les prometan comida mientras se desmejora absolutamente todo lo que tiene que ver con su alrededor, sin asfalto, ni luminaria, con aguas servidas”. “Eso es lo que tiene que encarar un programa que realmente empiece a terminar con la pobreza. Eso no da votos en estas elecciones y lo sabemos, pero soluciona el problema de la pobreza, que tiene que ver con una cuestión de dignidad”, concluyó.
Fuente: La Tecla
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