El exdiputado nacional, dirigente gremial y del peronismo de Junín, Oscar Romero, denunció haber recibido amenazas, poniendo los hechos en manos de la Justicia para que se investiguen. El actual funcionario del Congreso y su familia recibieron llamados intimidatorios, además de otros hechos de hostigamiento hacia su esposa e hijas. “Realice una denuncia sobre la panfleteada en mi domicilio, en la escuela de mis hijos, y llamadas telefónicas en mi domicilio particular, y me amenazaron a mí y a mi familia. Básicamente me dijeron vía telefónica que era un traidor, que dejara el peronismo, que dejara el movimiento obrero”, mencionó Romero a Infonoroeste. Romero relató que la DDI local trabaja en el caso, revisando las cámaras de seguridad de comercios vecinos al domicilio, además de los registros de llamadas entrantes al teléfono particular. Tras relatar que además de las llamadas al teléfono sufrió pintadas y la aparición de panfletos en el colegio al que concurren las menores, Romero señaló que "estamos tratando de individualizar el auto que pasó por mi casa con tres personas que se movilizaron por la noche. Esperemos que estas prácticas no se vuelvan a repetir”. No claudico ni las ideas ni mi forma de pensar, pero con mi familia no se deben meter”, insistió el exlegislador, expresando que "siempre fui cauto con mi vida privada, desde hace años que milito en esto, he ocupado cargos importantes, por lo que algunas pistas tengo y junto con mi abogado estamos avanzando en eso, y nos han llevado informaciones al respecto. La fiscalía tiene todas las cosas y está trabajando desde el primer momento”.
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