Cumbre del PJ con Cristina, Gioja, Insfran y Rojkés...15 años no es nada

Fue un movimiento estratégico. No habían pasado 48 horas de la onda expansiva del triunfo de Juan Schiaretti en Córdoba y Cristina Kirchner sorprendió con su presencia en el PJ, donde no ponía un pie desde hacía 15 años. Sin dar demasiadas pistas sobre su futuro electoral, se puso a “disposición” y en el “lugar que sea” para la construcción de una coalición grande. La ex presidenta habló durante unos 20 minutos. Repasó la gestión de Mauricio Macri (con especial énfasis en la toma de deuda) y enumeró también el deterioro de la economía, la destrucción del mercado interno, el desempleo y la “aniquilación” del poder adquisitivo de los trabajadores, según indicaron a A24.com fuentes del kirchnerismo. También planteó que la “alianza” del gobierno que suceda a Macri “necesariamente va a tener que ser más amplia que el frente electoral” que se adopte por la “magnitud de los problemas económicos que deja Cambiemos” y el estado de "pobreza en que van a quedar las economías regionales". En ese punto, el llamamiento incluyó a "todas las provincias". No por nada el cónclave contó con la presencia de gobernadores como Gildo Insfrán (Formosa) y Rosana Bertone (Tierra del Fuego) y jefes territoriales de la línea de Luis Beder Herrera (La Rioja) y Beatriz Rojkés (Tucumán), entre otros.
El mensaje
En otras líneas de su discurso, la ex presidenta insistió con el “pacto social” al que convocó desde la Feria del Libro pero aclaró que “no sería" como el del tercer Perón” porque “la situación del país y las personas son otras”. Según pudo reconstruir A24.com de algunos de los presentes, Cristina le dedicó también un párrafo a la situación del Poder Judicial, en la cuenta regresiva para el inicio del primer juicio en su contra por presunta corrupción en la obra pública. Sin detenerse en su propio derrotero, la ex mandataria denunció que Macri nombró a “casi el 30% de los jueces federales de todo el país” y que “tiene en carpeta entre un 60 o 70% más”.
Tierra adentro
A los asistentes también les llamó la atención lo cristalina que es para Cristina -y su entorno- la situación de los distintos referentes del peronismo. Ejemplo: en el Instituto Patria saben con precisión qué gobernador integra la “línea Pichetto” y cuáles son los diputados que levantaron la mano para votar el desafuero de Julio De Vido, por citar dos casos. Pero la información no se agota ahí. Incluso, por estos días, la ex mandataria está llamando a las provincias que todavía no tuvieron su elección para ordenar las internas del PJ. La Rioja, aún sin fecha de comicios, podría ser una de las que llegue a un acuerdo. Con el mapa electoral en la mano, desde el kirchnerismo confían que a muchos de los caciques provinciales les está pasando como a la propia Cristina: tenían mala imagen en las encuestas pero, a la luz de la crisis, subieron en la consideración electoral. Con esa expectativa se manejan por estas horas.

Fuente: A 24