Hoy, a partir de las 9:00, al menos una parte del conflicto derivado de las elecciones fraudulentas del 20 de octubre comenzará a decantarse por la vía institucional. A esa hora está convocada la sesión de la Cámara de Senadores y las tres fuerzas con representación parlamentaria han confirmado su asistencia con un acuerdo previo: se elegirá nueva directiva y el Movimiento Al Socialismo, como dice el reglamento de debates, ocupará la presidencia y la vicepresidencia.
Siete horas después, a las 16:30, pasará lo mismo en la Cámara de Diputados. Inmediatamente después, se comenzará el trabajo en comisión con dos temas únicos: la convocatoria a nuevas elecciones, con una ley corta y plazos igualmente acortados, y la selección de un nuevo Tribunal Supremo Electoral, de la cual también participarán cívicos y representantes de la sociedad para asegurar unas elecciones limpias en el menor tiempo posible.
A este acuerdo llegaron ayer la bancada del MAS, que congrega a más de dos tercios de los miembros de ambas cámaras, con la jefa de bancada de Unidad Demócratas, Shirley Franco, excandidata a la Vicepresidencia por Bolivia Dice No, que fue la encargada de anunciar el acuerdo ayer por la tarde en la Plaza Murillo.
En solo una semana de gestión de Jeanine Áñez como presidenta del Estado y -sobre todo- nueve días de ausencia de Evo Morales, el Movimiento Al Socialismo pasó de ser un partido hegemónico a uno carente de liderazgo, que teme participar de una sesión de Asamblea Legislativa (cuando las dos cámaras trabajan juntas) por miedo a partirse en pedacitos.Siete horas después, a las 16:30, pasará lo mismo en la Cámara de Diputados. Inmediatamente después, se comenzará el trabajo en comisión con dos temas únicos: la convocatoria a nuevas elecciones, con una ley corta y plazos igualmente acortados, y la selección de un nuevo Tribunal Supremo Electoral, de la cual también participarán cívicos y representantes de la sociedad para asegurar unas elecciones limpias en el menor tiempo posible.
A este acuerdo llegaron ayer la bancada del MAS, que congrega a más de dos tercios de los miembros de ambas cámaras, con la jefa de bancada de Unidad Demócratas, Shirley Franco, excandidata a la Vicepresidencia por Bolivia Dice No, que fue la encargada de anunciar el acuerdo ayer por la tarde en la Plaza Murillo.
EL DEBER tuvo acceso a 40 minutos de la sesión de bancada de diputados del MAS, celebrada ayer, y las presiones a las que está sometida saltaron de inmediato. También quedó claro que el regreso de Evo Morales al país hoy por hoy es imposible y que el masismo se plantea que su líder se quede al menos cinco años en México.
“Yo quiero participar de las elecciones producto de una ley, no sé ustedes”, dijo la diputada que dirigía la sesión.
Fuente y nota completa en: Diario El Deber
No hay comentarios.:
Publicar un comentario