sábado, 20 de noviembre de 2021

La fuente de energía más pura del mundo, el hidrógeno verde


El lugar elegido por la empresa australiana Fortescue Future Industries (FFI) para producir hidrógeno verde en la Argentina será Punta Colorada, en el Golfo San Matías. En este sitio de la provincia de Río Negro, ubicado unos 330 km al sur de Viedma y a 35 km de la localidad de Sierra Grande, esta compañía desarrollará el proyecto para el que anunció inversiones por US$8400 millones el lunes pasado.

La elección del lugar responde a que, en una primera etapa, la producción –que la empresa australiana prevé iniciar a finales de 2024 o principios de 2025– solo estará destinada a la exportación. Por eso, el proyecto incluirá la construcción de un puerto y la instalación de un parque eólico. En una primera fase, la planta generadora será de 650 MW, ampliable a 8 GW en fases posteriores.

La etapa piloto del plan, que se iniciará en 2022 y finalizaría en 2024, prevé producir unas 35.000 toneladas de hidrógeno verde, energía equivalente para satisfacer a 250.000 hogares. Y, en una segunda etapa que se extendería hasta 2028, se producirán cerca de 215.000 toneladas.

El proyecto se enmarca en las acciones iniciadas por la provincia rionegrina a fines de 2020 para desarrollar el potencial en materia de proyectos verdes. La idea es convertir a Río Negro en un polo mundial exportador de hidrógeno verde en 2030, con una capacidad de producción de 2,2 millones de toneladas anuales.

El hidrógeno verde es la fuente de energía más pura del mundo y tiene el potencial necesario para reemplazar hasta tres cuartos de las emisiones globales de gases de efecto invernadero si se mejora la tecnología a escala.

La elección de Río Negro está directamente vinculada con la disponibilidad de recursos renovables: la velocidad media del viento en esta zona de la Patagonia, de 8 a 12 metros por segundo (m/s), es una de las más altas del mundo. A su vez, la provincia se destaca por la disponibilidad y calidad de los recursos de agua dulce.

El agua es, de hecho, la materia prima en la producción de hidrógeno verde. La electrólisis del agua es el proceso que permite separar el hidrógeno del oxígeno de la molécula de H2O a través de una corriente eléctrica. En el caso del proyecto de FFI, la producción de hidrógeno se hará a partir de agua de mar desalinizada.

Más allá de la inversión que ahora confirmó la empresa australiana, en 2020, el gobierno provincial había solicitados al Instituto Fraunhofer de Economía de la Energía y Tecnología de Sistemas Energéticos de Alemania que elaborara un reporte científico sobre la viabilidad de la producción de hidrógeno verde en Río Negro.

El informe plantea dos escenarios: uno de consumo local y otro de exportación. En su estudio, el instituto alemán analizó la posibilidad de construir en 2025 una planta de producción de hidrógeno que se alimente con un mix de energía eólica y fotovoltaica. En ese sentido, se identificó como potenciales consumidores domésticos a las poblaciones de Bahía Blanca y el Alto Valle de Río Negro.

Se analizaron cuatro posibles ubicaciones para la construcción de una planta electrolizadora: Pomona (30 km al sur de Choele Choel), El Solito (entre Pomona y General Conesa), Laguna de la Retención (a 38 km del puerto de San Antonio) y El Chocón. “Debido a sus condiciones naturales únicas y a su ubicación, la Patagonia argentina es probablemente la región del mundo donde se puede alcanzar la mayor escala de producción de hidrógeno verde”, indicaron en el informe.

Pero advierten: “Para lograr la competitividad, el establecimiento de un mercado nacional de hidrógeno, la aplicación de la normativa técnica y de mercado necesaria, así como la concienciación y la aceptación por parte del público, deben considerarse políticas facilitadoras clave. En el caso de la Argentina, existen importantes mercados nacionales de hidrógeno. Sin embargo, la economía del hidrógeno verde requiere incentivos de mercado para crear un escenario de negocios para las industrias involucradas”.

El informe del Instituto Fraunhofer sirve de antecedente y se sumará a los diferentes estudios de prefactibilidad técnica que FFI iniciará en estos días, para analizar la calidad de los vientos en la zona de Punta Colorada, entre otras variables, de acuerdo a lo publicado por Paz García Pastormerlo para La Nación.

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