“Lo que ocurre en Rosario demuestra el fracaso rotundo de este gobierno en la lucha contra el narcotráfico. A falta de decisión política, coraje, estrategia y planificación, le liberaron el territorio a las mafias, que hoy se sienten con total impunidad de matar a ciudadanos al azar y hasta intentar amedrentar a la figura más icónica que tiene la ciudad”.
“Es vergonzosamente alarmante la no gestión de un presidente que, desde el sillón principal de la Asamblea Legislativa, se deslinda de responsabilidad por el avance narco y culpa con firmeza al Poder Judicial. Si esa misma convicción con la que trata de avasallar desde hace años a la Justicia, la dedicara a planificar y coordinar acciones con su ministro de Seguridad y con el gobernador de Santa Fe, dos autoridades absolutamente ausentes en esta batalla contra el delito, la situación sería diferente”.
“A su vez, tenemos en Santa Fe un presidente de la Suprema Corte de Justicia que trata de “chiquilinada” la propuesta de Patricia Bullrich de utilizar a las Fuerzas Armadas para combatir el narcotráfico en Rosario. Diría que la mayor chiquilinada es ver cómo Santa Fe está tomada por el narcotráfico y quedarse de brazos cruzados; acá tenemos complicidad por inacción en todos los niveles, sin gestión, sin justicia, y sin acción para que los rosarinos recuperemos la tranquilidad. La provincia extraña a Patricia, que tiene las convicciones y agallas para hacer las transformaciones necesarias que devuelvan la paz a la ciudad”.
“Es vergonzosamente alarmante la no gestión de un presidente que, desde el sillón principal de la Asamblea Legislativa, se deslinda de responsabilidad por el avance narco y culpa con firmeza al Poder Judicial. Si esa misma convicción con la que trata de avasallar desde hace años a la Justicia, la dedicara a planificar y coordinar acciones con su ministro de Seguridad y con el gobernador de Santa Fe, dos autoridades absolutamente ausentes en esta batalla contra el delito, la situación sería diferente”.
“A su vez, tenemos en Santa Fe un presidente de la Suprema Corte de Justicia que trata de “chiquilinada” la propuesta de Patricia Bullrich de utilizar a las Fuerzas Armadas para combatir el narcotráfico en Rosario. Diría que la mayor chiquilinada es ver cómo Santa Fe está tomada por el narcotráfico y quedarse de brazos cruzados; acá tenemos complicidad por inacción en todos los niveles, sin gestión, sin justicia, y sin acción para que los rosarinos recuperemos la tranquilidad. La provincia extraña a Patricia, que tiene las convicciones y agallas para hacer las transformaciones necesarias que devuelvan la paz a la ciudad”.
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