En el marco de una Jornada Nacional de Lucha el MIJD (Movimiento Independiente de Justicia y Dignidad) realizó ayer 12 de julio un corte y movilización al Obelisco para reclamar por fuentes genuinas de trabajo y aumentar el cupo de alimentos para los merenderos y comedores de la organización a nivel nacional.
Uno de sus dirigentes Alexis Mariño, explicó que “el corte es para reclamar al gobierno nacional que no queremos más planes sociales ni migajas, queremos fuentes genuinas de trabajo, que se reactive la actividad productiva para cambiar la situación económica en el país”. Otro punto importante de reclamo es “los trabajadores reclamamos alimentos para los comedores y merenderos que tenemos en las 23 provincias que durante la pandemia se ha triplicado la demanda y necesitamos refuerzos para cada lugar”. El MIJD agrupa a cerca de “33000 compañeros”.
Respecto a la mala prensa de “ser planero”, Mariño dice que “es una designación popular dado por sectores reaccionarios y de derecha que deberían observar el panorama general en el que viven los trabajadores en diferentes puntos del país, por ejemplos los compañeros de Garbarino que están reclamando por sus fuentes de trabajo, que los despidieron y no le pagaron absolutamente nada”.
Los planes hoy “son un paliativo para sobrellevar la situación lamentable que se vive en este país, nosotros no estamos de acuerdo con los planes sociales porque necesitamos se genere políticas laborales genuinas y que cada trabajador pueda darle de comer a su hijo en su casa, decida qué tipo de alimento comer y no consumir solo 6 o 7 alimentos que le da el gobierno”.
Mariño remarcó que en el movimiento “hay trabajadores en actividad que hacen reclamos populares por la gran necesidad que hay en los barrios, queremos que nuestros compañeros tengan un trabajo como corresponde, se puedan ir de vacaciones y vivir dignamente por el fruto de su trabajoRespecto a la coyuntura económica aclaró que con “el plan no se vive por la inflación galopante que sufre la Argentina” y agregó el dirigente “en la ciudad se ve claramente los pequeños comercios que han cerrado porque no hay una política por parte del gobierno para beneficiar a los trabajadores, es más, los han apretado y atorado a los pequeños y medianos comerciantes con mayores impuestos”. Y analiza que “los que cerraron por no poder pagar el alquiler son trabajadores que no pudieron sostener ese negocio o emprendimiento, han tomado créditos bancarios para invertir en ese emprendimiento o en ese sueño, vino la pandemia, no han trabajado y los créditos se lo han seguido cobrando con intereses”. Por ello indica “una falta de política de Estado para cubrir a esos sectores y a los trabajadores que hacen a la economía del país, en este contexto solo se benefician a las grandes empresas, concretamente el gobierno tiene un lenguaje de izquierda, pero actitudes de derecha”. El gesto claro sería “negocia con el FMI, les da concesiones a grandes empresas y les da la espalda a los trabajadores”.
“Podemos volver al 2001”
Por su parte la líder piquetera Nina Pelozo contó que “esta es una jornada nacional de lucha para pedir cupo de alimentos para los merenderos y copa de leche en todos los barrios, también aumentos salariales no solo para activos sino para los pasivos (jubilados y pensionados) y trabajo genuino para los compañeros ya que con 12.000 pesos por mes no se llega a fin de mes con esta alta inflación”.
Si bien, una delegación del MIJD se reunió ayer con el Ministerio de Desarrollo Social para destrabar “el conflicto del tema de los alimentos que es resolver el día a día para seguir cocinando en todo el país”, Pelozo enfatizó que “le estamos pidiendo al Gobierno la posibilidad de retrotraerse, poder dialogar y ver la forma de revertir esta situación para los comedores, así no se puede vivir, ni aguantar el hambre y la pobreza”
Ante las perspectivas a largo plazo, la líder explica “lo básico ahora es seguir con los comedores y los planes, asegurar los alimentos perecederos y el resto de verduras y carnes salimos pedir para poder sustentar el plato de comida cada día, pero la situación es muy difícil y cada vez empeora más”
Ante el interrogante ¿Qué esperan del Gobierno?, reflexiona “con este sistema no esperamos nada, sabemos que la política que implementa el Gobierno mucho no se puede resolver, quedó demostrado que acarreó más hambre, más desocupación y más miseria agravada por la pandemia”. Sin embargo, “no quita que se pueda rever la situación de los que más necesitan, por eso estamos haciendo el aguante en los barrios para que la gente no se levante y mínimamente venimos a pedir y que ellos tomen conciencia que podemos volver a un 2001 nuevamente y esta situación está permitiendo que ante cualquier cosa pueda levantarse la gente y volver a tomar las calles como fue en ese momento”, advirtió Nina Pelozo
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