La Cámara de Diputados dio media sanción al proyecto de ley del diputado Pablo Carro (FdT) para prorrogar las asignaciones específicas a industrias e instituciones culturales por un plazo de 50 años. Sin la prórroga que propone este proyecto, las asignaciones específicas de cultura caducarían en diciembre de este año, por decisión del gobierno de Macri, que sancionó la ley 27.432 en 2017, poniendo en peligro el financiamiento de gran parte de la industria cultural y las bibliotecas populares.
Durante el debate, la entrerriana Carolina Gaillard remarcó que “la oposición tiene reparos en prorrogar estas asignaciones a la cultura por 50 años, pero no se sonrojaron cuando decidieron endeudar a nuestro país por 100 años mientras eran gobierno. Es una vergüenza que hoy vengan a discutir el financiamiento de las industrias culturales”.
“La cultura es un derecho y el Estado está obligado a garantizar su financiamiento con asignaciones específicas para que sea diversa, inclusiva, federal y que estén todas las voces representadas”, continuó Gaillard. Y agregó: “el mundo ha imitado este modelo de gestión donde la continuidad de las políticas culturales está garantizada por un modelo de financiamiento estable y previsible. Por eso es necesario que lo recaudado vaya directamente al cine, al teatro y a las bibliotecas populares y no a rentas generales”.
“Sin asignación específica, la biblioteca popular de mi pueblo debería cerrar sus puertas. Sin asignaciones específicas, los realizadores audiovisuales de nuestra provincia no podrían hacer sus películas, ni los teatreros producir y presentar sus obras. Por eso votamos afirmativamente esta ley, porque la cultura es un derecho, no una mercancía. El financiamiento de la cultura no puede quedar supeditado a la discrecionalidad de ningún gobierno. Este modelo de financiamiento ha funcionado muy bien, por eso debemos reafirmarlo”, concluyó Gaillard.
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