Los operativos, encabezados por el ministro Sergio Berni y el jefe de la fuerza, Daniel García, fueron llevados adelante por la Delegación San Nicolás de la Superintendencia de Investigación de Tráfico de Drogas Ilícitas con una investigación iniciada en mayo por la UFI N°1 a cargo de Verónica Marcoantonio.
Los allanamientos incluyeron dos objetivos en la periferia de Rosario y cuatro en San Nicolás. Se incautaron 12 kilos y medio de cocaína, 20 de marihuana, dos pistolas, dos rifles, un chaleco antibalas, balanzas y handies de comunicación. También participaron las F.O.E (Fuerzas de Operaciones Especiales) GAD, Grupo Táctico Halcón y UTOI, con 220 efectivos.
Según fuentes del caso, Julio y Gonzalo Villalba, hermanos, oriundos de Rosario, fueron señalados como los jefes de la organización. Juan Ramón Altamiranda fue señalado como el encargado de traficar la droga hasta Buenos Aires. Se sospecha que una madre se dedicaba a la venta con su propio hijo: Claudia Patricia González y su hijo L.R la comercializarían al menudeo en San Nicolás y zonas aledañas.
Los hermanos Villalba, Altamiranda y Claudia González fueron detenidos.
El sello de los panes de cocaína fue otro foco de atención: se encontró la figura de un delfín, repetida en varias investigaciones narco, atribuida por investigadores federales al salteño Delfín Castedo, señalado como uno de los mayores proveedores del noroeste argentino, hoy detenido.
Julio Villalba, puntualmente, fue arrestado en Rosario, tal como Ramón Altamiranda. El jefe de la banda fue detenido con tres celulares que podrán ser peritados. Altamiranda tenía tres kilos de marihuana en su poder. Los investigadores valuaron la cocaína en más de 25 millones de pesos. Se la encontraron a Gonzalo Villalba, que cayó en su casa de Rosario en la calle Jacobazzi. González fue arrestada en San Nicolás con unas pocas bolsas en su poder. La Bonaerense tenía cinco pedidos de detención en sus manos, cuatro fueron concretados, con otro joven aprehendido.
La aparición de Berni en el cierre de un operativo interjurisdiccional que llega a Rosario en un momento políticamente sensible tiene una lectura evidente. Esta semana, el Ministerio de Seguridad de la Nación aceleró el envío de 160 efectivos de fuerzas federales de cara a las PASO del domingo, con jefes de divisiones tácticas como Albatros y Alacranes entre los despachados, con el subsecretario de intervención federal Luis Morales.
Fuente: Infobae
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