En su última columna editorial del programa +Voces, el periodista Luis Majul analizó el presente de Cristina Fernández de Kirchner al preguntarse si la vicepresidenta "entró en crisis" y en "un estado de descomposición política" producto de la derrota del Frente de Todos en las PASO y las dificultades para revertir los resultados en las elecciones de noviembre. Además reveló un detalle que pone al descubierto este escenario: una queja insólita de sus vecinos.
"¿Cristina entró en crisis? ¿El kirchnerismo y su jefa están entrando en un estado de descomposición política? ¿Le están empezando a perder el miedo?", se preguntó Luis Majul anoche en la trasmisión de su envío televisivo del canal LN+.
En ese sentido, consideró que algunos síntomas de esa descomposición se evidencias en las declaraciones del intendente de Escobar, Ariel Sujarchuk, que pronosticó que "si las medidas que se toman en los próximos días no generan una nueva empatía con la sociedad, una elección que salió mal no será fácil de revertir", al igual que en algunos gestos de Fernando Gray y Juan Zabaleta, quienes publicaron hace unos días una foto en la que muestran unos huevos de gallina araucana, presentándolos como "los grandes huevos del conurbano".
Incluso la propia Cristina Fernández de Kirchner ha demostrado su irascibilidad ante la derrota electoral en la carta que publicó contra el presidente Alberto Fernández y su círculo de colaboradores, o en los furiosos tuits y mensajes contra dirigentes de la oposición como Mauricio Macri y María Eugenia Vidal.
"(Cristina Kirchner) está perdiendo el foco en un contexto de pandemia con más de 115.000 muertos, una crisis económica cada vez más profunda, con un dólar subiendo sin techo y un estado de ánimo abiertamente contrario a la oligarquía gobernante de la que ella es fielmente representante", añadió.
De hecho, Majul recordó que la vicepresidenta "tuvo que recurrir a alguien que desprecia como Juan Manzur para evitar ser derrotada en distritos clave como Chubut, Santa Fe y La Pampa, y no perder el quórum en el Senado. También debió intervenir la comarca de Axel Kicillof para evitar que los barones del conurbano le vuelvan a dar la espalda como dicen que hicieron en las PASO".
"Un detalle doméstico: sus vecinos del departamento de Juncal y Uruguay se quejan porque dicen que cada día grita más. Parece que no encuentra la llave para dar vuelta la elección", comentó el conductor sobre lo que ya se comenta en el edificio del coqueto barrio porteño de Recoleta donde Cristina Fernández de Kirchner tiene su residencia.
Asimismo, Majul indicó que "al igual que pasa con Alberto Fernández, nadie tiene miedo de enrostrarle en la cara sus contradicciones, como su defensa a la salud pública mientras ella y sus ministros se atienden en clínicas privadas, o el apoyo irrestricto a los barras bravas que hacen destrozos en Rosario, Racing e Independiente".
Fuente: Diario Uno - Contexto
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