El secretario general de los denominados “metrodelegados”, Roberto Pianelli, informó ayer por la tarde que extenderán las medidas de fuerza por otras 24 horas por “falta de acuerdo” con la empresa Metrovías. A la par, el sindicato con personería gremial del sector, la UTA, anunció un entendimiento salarial de 23 por ciento. En el medio, continúa vigente la pelea política entre la Ciudad y la Nación.
"Los metrodelegados a esta altura han sido una creación del kirchnerismo y responden al kirchnerismo", sentenció anoche el jefe de Gobierno Mauricio Macri minutos después de que terminara sin acuerdo una nueva reunión por el conflicto.
"¿Pianelli dónde estaba anoche? Estaba en la Casa Rosada, lo dijo la prensa. Yo no duermo ahí porque no tengo muchos amigos. ¿Qué hacía Pianelli de madrugada en la Casa Rosada?", se preguntó en alusión al encuentro que mantuvo anoche el secretario general de los metrodelegados con la jefa de Estado.
Tras criticar a los metrodelegados, Macri destacó "la vocación de diálogo" de la UTA, que "decidió seguir dando el servicio sin afectar a cientos de miles de personas". Según el jefe de Gobierno de la Ciudad, "el tema de los paros en los subtes apareció hace cinco años, junto con los metrodelegados".
El jefe comunal sostuvo que "no hay un ámbito de negociación razonable" y responsabilizó al gobierno nacional por la continuidad del conflicto. "No puedo cambiar las decisiones de la Presidente, no hay vocación de trabajar en forma conjunta", agregó al respecto.
"Lo del subte no es un hecho aislado: hay que sumar lo del Banco Ciudad, el aumento de la luz, el retiro de policías de hospitales y escuelas. Son muchos hechos, marca una clara vocación de someter a todo aquel que no piense de la misma manera", precisó Macri sobre la relación entre su gestión y Nación.
El jefe comunal añadió que "la presidente Cristina Kirchner quiere llevar a la sociedad argentina a un modelo chavista, de pensamiento único, que busca someter a quienes piensan distinto".
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