Schiaretti, la República y su hombre predilecto, Llaryora

Por Carlos Mariscal
En el podio del candidato triunfante, el domingo a la noche el gobernador reelecto habló en La Docta y manifestó un mensaje que marcó pautas republicanas para su gestión de aquí en mas.
Al tomar el micrófono cerca de las 22:30, el mandatario cordobés se mostró exultante y resaltó que obtuvo "la mayor diferencia de la historia desde la vuelta de la democracia con el segundo". Sin embargo, en su discurso en el bunker de Hacemos por Córdoba, aclaró: "Ni por asomo esa diferencia nos hará caer en ninguna arbitrariedad. Ni creer que esa diferencia nos dio la suma del poder público en Córdoba. Ni por asomo esa diferencia nos hará creer que tenemos la verdad entre nuestras manos". Segundos más tarde, Schiaretti consideró que su victoria le da un espaldarazo a la construcción de un "peronismo republicano" a nivel nacional. "Esta es una coalición plural, democrática, progresista, que cuida de Córdoba y los cordobeses. Y los peronistas que formamos parte de esta coalición somos los que pertenecemos al peronismo federal, democrático y republicano", destacó. En un mensaje a la Casa Rosada, subrayó: "El otro mensaje es que los cordobeses queremos la moderación. No queremos la grieta que tanto daña a la Argentina. Hoy Córdoba también demostró que no sirve para ganar elecciones". Y cerró: "Estamos convencidos que no habrá república en la Argentina sin el peronismo y no habrá futuro para el peronismo en la Argentina si no es republicano".

Quien que se precie de republicano no va a estar de acuerdo con esto, seguramente nadie, pero llegado el momento de instrumentar todas estas declaraciones tan importantes, sería bueno que "el gringo" como lo llaman sus amigos comience por exigirle a su candidato predilecto, Llaryora, que cumpla con sus mandatos (en dos años lo hizo candidato tres veces, lógicamente a tres cargos distintos) que al ganarlos no demostró su inclinación republicana, porque ademas de ser exintendente de San Francisco y candidatearse como alcalde de la capital (aunque fue a votar a San Francisco), en la mitad de sus mandatos se candidateo a otra cosa, sin cumplir con los compromisos adquiridos con sus votantes. De paso que aclare si renunció o no aún a alguno de los tres cargos y por lo tanto en cualquier momento podría pedir licencia en su nuevo cargo y volver a asumir alguno de los anteriores, no siendo esto muy republicano que digamos. Que se defina y se quede con un solo cargo a saber: vicegobernador, diputado nacional o intendente de la ciudad de Córdoba cumpliendo los cuatro años.
Como terminaba sus comentarios un viejo periodista peronista, Américo Barrios, en la histórica radio Colonia,: Gobernador no le parece ?