Carta abierta de Marcelo Lugones

He dejado, como futbolero que soy, dejar pasar el gran evento del Mundial de Fútbol, donde aun todos tenemos, esa rara mezcla, de orgullo, y satisfacción con tristeza y bronca, (y eso que me falta en lo personal seguir “enfermándome” con mi San Lorenzo en las semifinales de la Copa Libertadores), para anunciarles a mis amigos de las redes sociales, en mi muro personal, mi decisión de aceptar el desafío de asumir la responsabilidad de ser, candidato a Intendente en las próximas elecciones en mi MUY NOBLE y LEAL ciudad de Santiago del Estero. Soy un ciudadano que como Uds., en el diario vivir podemos ver la agonía de los valores cívicos y democráticos. Que podemos sentir el dolor de quienes han perdido la confianza y la esperanza de un porvenir mejor para nuestra ciudad. Pero también se, que los santiagueños somos guerreros auténticos, inquietos y buscadores de nuevas oportunidades. Estamos acostumbrados a caernos y a levantarnos, a buscar una y otra vez nuevas oportunidades. Hemos visto el crecimiento económico de muchos que no hicieron un culto al trabajo, sino un culto del oportunismo político. También presenciamos el derroche del dinero público en obras que la gente no eligió desde sus demandas y necesidades. Asistimos a una clara decadencia de los valores CIVICOS, cada vez la gente PARTICIPA menos, descree de la POLITICA y de los políticos, VOTA sin conocer al candidato, solo porque alguien le eligió por él. Asumo una vez más el compromiso y la responsabilidad de representar un PROYECTO de GOBIERNO MUNICIPAL, como candidato a Intendente. No solo es mi deseo compartir el anhelo de un SANTIAGO DISTINTO sino que quiero hacerlo con Uds. creo en la capacidad de cambio de todos nosotros, asumo este desafío porque creo en la FUERZA de la COMUNIDAD. Tengo mi confianza puesta en todos Uds. y en las personas que me animan permanentemente. Desde el mandato superior de miles de santiagueños que nos reclaman el superar desencuentros, personales e ideológicos, conformamos un FRENTE, para enfrentar no a personas, sino a la injusticia, a la corrupción, a la desigualdad, a la persecución, al autoritarismo, a la discriminación, a la intolerancia y miles de demandas insatisfechas que se cansaron de la falsa promesa de varios años. Estamos a favor del dialogo, de la unidad en la diversidad, de la participación, del compromiso, de la transparencia, y de la búsqueda del bien común. Y para que esto ocurra tenemos que sumarnos a un Proyecto donde cada uno de nosotros tenga un valor humano. Si somos capaces de salir de ese estado de DESCONFIANZA y animarnos a un DESAFIO, seguramente esta ciudad se convertirá en una verdadera y autentica comunidad, donde sus gobernantes sean reconocidos por lo que hacen y no por lo que se llevan. Los desafíos son más importantes que las promesas de cambiar por cambiar nomas. Porque los desafíos se hacen entre todos y los cambios son consecuencia de ello. Los santiagueños tenemos la posibilidad de seguir eligiendo a los mismos, de seguir diciendo “roban pero hacen”; pero también tenemos la oportunidad de demostrarnos que se puede gobernar con honestidad, sin enriquecerse en la función pública y haciendo junto a los vecinos lo que ellos necesiten. Quiero construir con todos Uds. un PROYECTO que no solo se base en la HONESTIDAD, sino también en el COMPROMISO de devolverle al vecino la ESPERANZA de volver a CONFIAR en nosotros mismos, en las INSTITUCIONES, en los VALORES perdidos. Sé que en las redes sociales, que tienen un valor imposible de reemplazar, muchos la toman para descalificar, injuriar, calumniar, quiero decirles que, no solo no responderé nada de eso, sino que desautorizo absoluta y totalmente a quien, desde el legítimo acto de defensa, pretenda responder en mi nombre. Presentaremos un PROYECTO superador y no de improvisaciones, basado en el acompañamiento de la gente en la honestidad y transparencia. Pediremos desde este momento, un debate entre los candidatos, de frente a los ciudadanos, no para agraviar e injuriar sino para decirles que proponemos ante cada demanda y problema de ellos. Si esto sucede, podremos decir que ya ganaron los ciudadanos, porque serán los jueces implacables con su sufragio secreto. Es la hora de que en Santiago del Estero ganen los buenos proyectos y no los personalismos circunstanciales. Hay que llegar a gobernar con equipos de trabajo dispuestos a servir con ideas y honestidad. Marcelo Lugones