A partir del proceso electoral que se viene desarrollando en el gremio que nuclea a los trabajadores de Aguas Santafesinas s.a., se pusieron de manifiesto una serie de movimientos de algunos sectores internos y perifericos a la empresa, que encendieron las alertas de quienes supieron padecer la experiencia de la administracion a cargo de la multinacional francesa.
Durante la actual gestión a cargo del Presidente Hugo Morzan, se intenta imprimir un carácter centrado en la eficiencia social, al privilegiar la satisfacción del derecho al acceso al servicios de provisión de agua potable más alla de la capacidad economica de los usuarios, a pesar del esfuerzo que esto representa para el gobierno de Omar Perotti, de quien seguramente emanan las directrices que definen esta orientación.
Esta perspectiva es totalmente opuesta a la adoptada por el grupo economico frances mientras duró su experiencia a cargo de la operación de la empresa, concebida más como un negocio cuyos criterios en la toma de decisiones tienen naturalmente como principal propósito la reduccion de los gastos y la maximización de los beneficios, afectando en ultima instancia la calidad de la prestación en terminos del alcance del suministro a la población que reside en la jurisdicción provincial.
Es sabido que los negocios de las empresas de servicios publicos concesionadas, son detentadas por grupos económicos por el alto rendimiento que pueden ofrecer, y la sucesion de hechos que salieron a la luz en los ultimos dias, configuran un escenario que permite explicar el inusitado nivel de confrontación en el ambito sanitarista.
Al completarse el cuarto año de gestion de la actual Comision Directiva del Sindicato de Obras Sanitarias de Rosario, encabezada en su momento por el reconocido referente gremial Oscar Rabanito Barrionuevo, y actualmente a cargo de Silvio Barrionuevo (al ser Secretario Adjunto, reemplaza naturalmente a su padre por razones de salud), surje de manera sorpresiva una facción opositora formada por 9 miembros de la comision en ejercicio, que si bien mayormente no ocupaban roles de alta responsabilidad, no dejaron de sorprender al resto de los integrantes.
Mas tarde, según trascendió en el interior de la empresa, se supo que la actual vicepresidenta de Aguas Santafesinas S.A. la Sra. Marisa Gallina, alienta al grupo opositor contra el espacio conducido ahora por Silvio Barrionuevo, al punto que los asiste en la difusión de distintas manifestaciones que buscan socavar la credibilidad del Secretario General en ejercicio.
Esta intervención de la funcionaria de ASSA, no tendría su origen en una posible hostilidad con el Gobierno de Omar Perotti, con quienes Barrionuevo suele tener una buena relación por afinidad ideologica, sino en el hecho de que la Sra Gallina es esposa del empresario rosarino Orlando Vignatti, conocido por distintos desmanejos en medios de comunicación como “CABLE HOGAR”, el diario “El Ciudadano”, “El Tribuno de Tucuman” y “Ambito Financiero” entre otros, varios de los cuales concluían indefectiblemente en su desmantelamiento, sacrificando a una importante cantidad de trabajadores en pos de la mera especulación economica. Las causas judiciales que ostenta en su contra darían sobradas pruebas de la reincidencia en sospechosas prácticas comerciales. Su perfil como empresario se terminaría de configurar con la propiedad de empresas off shore en Panamá, y con la perdida de un hotel emplazado en Miami a raíz de una delicada disputa familiar atravesada en tierras norteamericanas, donde residirían una de sus ex esposas con un hijo fruto de esa relación.
De este modo, parecería estar entretejiendose una confluencia entre parte del Directorio de Aguas Santafesinas, un grupo economico interesado en hacer negocios a partir de vinculos cercanos con la politica provincial, y la pretensión de aceitar todo el entramado con una nueva comision directiva sindical, conducida por la dupla Guevara-Ainsuain, funcionales al interes de estos sectores especulativos.
Fuente: www.notadetapa.com
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