En los últimos días el grupo de voluntarios que colabora en el proyecto municipal de la chacra “El Arraigo” en Tandil completó las tareas de cosecha de unos 15.000 zapallos que personal del Ejército Argentino trasladó a los depósitos de la Secretaría de Desarrollo Humano y Hábitat para que sean utilizados en los planes alimentarios destinados a familias vulnerables de diferentes zonas de la ciudad.
La chacra “El Arraigo”, es un espacio donado a la comuna por el vecino Pedro Etchevarne, en el que se avanza con la generación de un centro agroecológico con propuestas educativas y productivas.
El espacio, coordinado por la Dirección de Asuntos Agropecuarios de la Secretaría de Desarrollo Productivo y Relaciones Internacionales, se encuentra ubicado a cinco kilómetros del paraje El Gallo y cuenta con 21 hectáreas.
Entre las actividades que se desarrollan en el lugar se encuentra la siembra de zapallos que desarrollan de forma conjunta las Secretarías de Desarrollo Humano y Hábitat y Desarrollo Productivo y Relaciones Internacionales.
Luego de una primera experiencia de prueba concretada en 2020, con la ayuda de un importante grupo de voluntarios se plantaron tres hectáreas y media, de las cuales se obtuvieron unos 15.000 zapallos.
El municipio acompaña con módulos de alimentos frescos a más de 500 familias, principalmente integradas por adultos mayores y personas con discapacidad. Esos módulos se entregan cada quince días y se componen de productos adquiridos por la comuna, lo producido en El Arraigo y las diferentes donaciones que se reciben.
El Director de Asuntos Agropecuarios, Ignacio Diribarne, detalló: “A partir del gran aporte de los voluntarios pudimos completar esta cosecha que nos dio una gran cantidad de zapallos, que ya están a disposición para ser utilizados”.
“Paulatinamente vamos fortaleciendo este proyecto, que como vemos comienza a dar sus primeros frutos. Además de la siembra de zapallos, tenemos colmenas del programa Proapi del INTA y se sembraron 2 cultivos no convencionales; que lo hizo Épicos en un convenio con el Municipio”, agregó.
En el predio funciona la coordinación de agroecología, que plantea tres ejes principales de trabajo: la producción de alimentos sanos y en cantidades suficientes para el autoabastecimiento local, la promoción del trabajo que vienen realizando algunos productores y la educación y capacitación sobre las diversas prácticas productivas existentes, como nos informa 0223.com.ar
Luego de una primera experiencia de prueba concretada en 2020, con la ayuda de un importante grupo de voluntarios se plantaron tres hectáreas y media, de las cuales se obtuvieron unos 15.000 zapallos.
El municipio acompaña con módulos de alimentos frescos a más de 500 familias, principalmente integradas por adultos mayores y personas con discapacidad. Esos módulos se entregan cada quince días y se componen de productos adquiridos por la comuna, lo producido en El Arraigo y las diferentes donaciones que se reciben.
El Director de Asuntos Agropecuarios, Ignacio Diribarne, detalló: “A partir del gran aporte de los voluntarios pudimos completar esta cosecha que nos dio una gran cantidad de zapallos, que ya están a disposición para ser utilizados”.
“Paulatinamente vamos fortaleciendo este proyecto, que como vemos comienza a dar sus primeros frutos. Además de la siembra de zapallos, tenemos colmenas del programa Proapi del INTA y se sembraron 2 cultivos no convencionales; que lo hizo Épicos en un convenio con el Municipio”, agregó.
En el predio funciona la coordinación de agroecología, que plantea tres ejes principales de trabajo: la producción de alimentos sanos y en cantidades suficientes para el autoabastecimiento local, la promoción del trabajo que vienen realizando algunos productores y la educación y capacitación sobre las diversas prácticas productivas existentes, como nos informa 0223.com.ar
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